El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación pidió votar al Frente de Todos. "El futuro que le ofrece Macri a la sociedad ya lo conocen: es de endeudamiento, el sistema financiero y la parálisis del sistema productivo", sostuvo.
Por Natalia Prieto
El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Julián Domínguez, pasó por la ciudad, se reunió con empresarios de distintos rubros y resaltó la necesidad de “exportar e incorporar valor agregado para salir adelante”. Además, invitó a votar a los marplatenses el próximo domingo durante una entrevista exclusiva con LA CAPITAL.
-¿Cuál es el balance de sus casi dos meses al frente del Ministerio?
-La verdad es que no pensaba nuevamente estar en la función pública, estaba trabajando en la industria automotriz, en Smata, con un proyecto de los gremios industriales. Fue una convocatoria imprevista del Presidente, en un momento difícil del país, y acá estamos.
-¿Y por qué aceptó?
-Porque es un momento difícil del país y porque a mí el peronismo me dio todo, me formó, me preparó, estudié. Uno estaba medio de vuelta ya y a lo mejor el Presidente entendió que podía ser útil, un instrumento que contribuyera al diálogo, a juntar las partes. Si Dios me dio el don de trabajar para resolver conflictos, acá estoy. Hice un posgrado en pandemia sobre la negociación agrícola, porque quería escribir sobre el valor que tiene el sector agroalimentario en la Argentina. Veo una oportunidad extraordinaria para este sistema productivo. quizás me entusiasma eso, volcar con mayor libertad lo que pude ver en los mercados globales, una oportunidad para industrializarse y crecer. Soy parte de una Argentina a la que le duele que el país tenga que seguir endeudado en dólares como está. Me rebela la irresponsabilidad con que una generación de argentinos nuevamente tiene que transitar un camino que nos lleva al peor de los lugares. Y la única forma de salir es exportar, incorporar valor agregado, no quejas. Hay que encontrar los instrumentos.
-Se reunió con empresarios y gremios de la pesca, ¿trataron la baja de aranceles a la exportación de varias especies y cómo afecta eso en la realidad cotidiana?
-Significa que aquel que industrialice, el que exporta la materia prima va a pagar un costo mucho más alto y arancel de exportación que aquel que industrializa, que genera valor agregado, empleo y aplica conocimiento. Queremos estar en las góndolas del mundo. Nuestra posición geográfica y la calidad ambiental y de nuestros alimentos son de primerísimo nivel. Hay cada vez más consumidores más exigentes, entonces si le damos valor agregado, generamos riqueza en el país y seguramente nuestras posibilidades de crecer van a ser mucho mayores.
-¿Cómo está el tema de los cupos a la carne vacuna?
-El 2020 ha sido el año de mayor exportación de la historia argentina con 960 mil toneladas de carne vacuna. Este año va a ser el segundo o tercer año de mayor exportación de la carne de la historia. Hay que tener presente, como se dice que la pesca es un recurso limitado, en la ganadería pasa lo mismo que tarda entre 4 y 5 años, con lo cual uno puedo exportar si tiene la fábrica de la ganadería: las vacas. Con un sistema productivo eficiente con peso de faena, para tener más volumen, quiero que se exporten un millón de toneladas. Para eso tenemos que ser muy eficientes en el peso de faena, en la productividad, financiar la alimentación a pasto con mejor forraje porque la calidad de nuestro sistema reproductivo está en la alimentación del animal.
-¿Y en cuánto tiempo se puede llegar a esa meta?
-Creo que en 3 o 4 años Argentina puede llegar a estas metas, si hacemos los que tenemos que hacer. El stock ganadero va a aumentar en un millón de cabezas este año.
-Mar del Plata y Batán tienen un cordón frutihortícola muy importante, ¿cómo potenciarlo?
-Hay dos o tres cosas que estamos pensando. Tenemos que lograr que los productores de los mercados frutihortícolas de grandes centros de consumo tengan la titularidad de la tierra, porque alquilan con contratos a un año en la mayoría de los casos, con lo cual están sometidos a una imprevisión permanente. Después hay que ver el mercado y la organización del comercio de cercanía, los centros de distribución, el llegar a las mesas porque cuanta más cercanía haya menos flete se pagará. Y estamos estudiando todas las formas posibles de financiamiento especial en el sistema bancario, con plazos más largos. Es un combo de consolidar derechos, garantizar cercanía y mejorar la comercialización.
-¿Qué panorama avizora el 15 de noviembre?
-Creo que lo que nos gustaría es que la gente participe más en el proceso electoral, que vayan a votar. El futuro que le ofrece (Mauricio) Macri a la sociedad ya lo conocen, es de endeudamiento, el sistema financiero y la parálisis del sistema productivo. El futuro que ofrecemos es trabajo, inversión, tomar riesgo y asumir el futuro como una oportunidad para que recuperemos la confianza en nuestras propias capacidades. Las legislativas son procesos en los que la sociedad manda señales y si los gobiernos toman nota rápidamente se pueden recuperar, como ya pasó. Mar del Plata es estratégica para cualquier proyecto de país, queremos una Argentina con trabajo y no con planes sociales.
-Usted tiene como un máster en gestión de crisis porque asumió en este Ministerio después de la 125 y ahora.
-Será que Dios me pide esto y ojalá que esté a la altura de las circunstancias.